Harold Hernán Moreno

HaroldHMoreno@hotmail.com
OPINIÓN

“Reciclar en familia: Un hábito”

Nos preguntamos en los últimos días, ¿hasta cuando va a llover?, pero poco o nada hacemos para cambiar nuestros hábitos con respecto a la protección y control del medio ambiente, el reciclaje de las basuras y residuos que generamos, el ahorro de combustible, energía y agua que consumimos. Es necesario concientizarnos de la importancia de cuidar el entorno y de reutilizar los productos. Enseñar a los niños(as) desde la casa y construir hábitos "ecológicos".
La mejor enseñanza para los niños(as) es el ejemplo de los mayores en la tarea del reciclaje, nada mejor que observar, cómo los padres apagan las luces, utilizan las bicicletas, caminan, no malgastan el agua, no arrojan desperdicios al suelo, separan las botellas de cristal, los envases o los periódicos y las revistas, una vez que han comprobado que a estos residuos no se les puede dar una segunda utilidad.
Algunas familias han creado el hábito de guardar envases, cajas, papeles de colores, revistas, o incluso juguetes o sus partes, pensando que pueden ser utilizados en otro momento, haciendo alguna manualidad o actividad con los niños(as) o una fuente de generación de ingreso. No será difícil ver cómo los niños(as) imitan a sus padres y rebuscan para rescatar alguna cosa antes de tirarla y cómo les dicen luego orgullosos "Mamá, papá ¡Para la caja del reciclaje!".
Hacer que ellos se sientan responsables e involucrados con el cuidado del medio ambiente es tarea de los adultos, maestros y gobernantes; si hacemos bien la tarea veremos cómo nos sorprenden con sus actos.
¿Cómo explicárselo a los niños?, Cuando son muy pequeños les es imposible comprender conceptos como el calentamiento de la tierra, sus efectos y las razones por las que debemos reciclar. En su lugar, podemos ayudarles a desarrollar una buena relación con el entorno, la naturaleza y aprender los hábitos de ahorrar, separar, reciclar y reforestar.
¿Cómo enseñarles el hábito de reciclar?, Todas las familias pueden hacer cosas para ayudar a proteger el planeta con pequeños gestos. Ayudar a los niños(as) a construir este hábito desde pequeños es esencial. Recuerda enseñarle cosas como:Ahorrar electricidad, Reducir el consumo de agua, Reciclar y separar los productos que consumimos, Limpiar y reutilizar el papel aluminio, Reutilizar las bandejas de la fruta envasada, Utilizar pilas recargables, Utilizar un reductor de caudal de agua en los grifos y baterías sanitarias, ensuciar bien la ropa antes de lavarla, Llevar bolsas de tela para hacer la compra, evitar bolsas de papel o plástico, porque acabas con los árboles y el petróleo, Reducir la basura que generamos, Crear una habitación "verde" pintando de un color claro las paredes, usar bombillas de bajo consumo, evita impresiones o copias innecesarias, y por supuesto la importancia de reforestar. Hacer un Plan de Acción de Reciclaje Familiar y laboral.
Existen muchas formas de aportar nuestro grano de arena para contribuir a conservar la Naturaleza y así vivir en un planeta mejor. Desde la casa y el trabajo ponernos manos a la obra y diseñamos nuestro "Plan de Acción Ecológico Familiar" o “Plan de Reciclaje Familiar” que fije las normas y las rutinas para enseñar a los niños(as). Con estos sencillos ejemplos enseñamos hábitos para convivir en el mundo actual. El resultado de mañana será gracias a lo que hagamos hoy y con paciencia y esfuerzo los niños también lo aprenden. ¿Y tú? ¿Qué estás haciendo para conservar la naturaleza?
En Buga y las ciudades intermedias, debemos acoger la propuesta de don Álvaro Ramírez Girón de realizar proceso de residuos sólidos que nos generen abonos orgánicos, empleos directos e indirectos, ahorro en el pago de recolección de basuras, pero lo más importante ser generoso con el ecosistema.

“Pensar como privado para ejecutar como público”

Las disminuciones presupuestales y el incremento de los gastos territoriales hacen necesario que los entes públicos, sin privatizar, realicen convenios y/o alianzas estratégicas con las empresas privadas para cubrir los objetivos del Estado social de derecho. Los servidores públicos deben pensar como privado para ejecutar como público, para poder generar un progreso sostenible buscando las cosas que nos unen, en vez de lo poco que nos separa y causa la diferencia.
El progreso sostenible requiere alianzas, y las alianzas sostenibles demandan claridad entre las partes para que se puedan definir intereses comunes, de este modo se van a alcanzar soluciones comunes. El punto de partida es la creación de confianza legítima entre las partes –sin confianza no van a haber alianzas de ninguna forma-.
Y si uno pregunta, “¿por qué las empresas deben pensar en alianzas y en un nuevo rol dentro de la sociedad?”, la respuesta es clara: “porque riqueza implica más una obligación para compartir con otros que un privilegio a disfrutar solo y sin límites”; Hoy La Empresa privada debe cada vez más aplicar la RESPONSABILIDAD SOCIAL EMPRESARIAL (RSE), que es “ la voluntad de una empresa productiva por jugar de manera completa su papel de ser motor de desarrollo en la comunidad a la que pertenece aportando visión, valores, capacidades especiales, recursos humanos y recursos financieros para un desarrollo económico, social y ambiental más equitativo y sostenible.” Es el momento que las alianzas público-privadas se afiancen como el modelo a seguir para generar progreso sostenible, en un mundo crecientemente transnacional, y para lograrlo el ente público debe recuperar su credibilidad, autoridad, liderazgo, respeto y sobre todo “CONFIANZA LEGÍTIMA”; y la empresa privada desarrollar su responsabilidad social sin temor ni ocultamiento.
Las Alianzas Público-Privadas buscan que, a través de esquemas de cooperación voluntaria entre el gobierno, los actores privados y la sociedad civil, se definan objetivos comunes y se identifiquen mecanismos de trabajo conjunto que permitan, entre otras, contribuir a la superación de la pobreza y promoción de la equidad y el desarrollo sostenible, contribuyendo a una mejor calidad de vida.
En las ciudades intermedias, que albergan el 76% de la población, se hace indispensable esta nueva co-responsabilidad que, por necesidad y por su propio interés, las empresas deben asumir respecto de la generación de ingreso, calidad en la educación, eficiente prestación de los servicios públicos y de salud en las ciudades donde están insertas. Se reitera No es que las empresas privadas tengan que sustituir a las públicas, sino que se hace necesario aplicar la teoría de las cinco W: Dónde, Cuándo, Cómo, Quién y Por qué.